En Air Canada creemos firmemente que el intercambio cultural es una herramienta poderosa para construir puentes y enriquecernos mutuamente
En pleno verano canadiense, la Isla Manitoulin —considerada la isla de agua dulce más grande del mundo— se transforma en el escenario del Festival Internacional de Cine Weengushk (WIFF, por sus siglas en inglés), un espacio donde las historias no solo se cuentan, se sienten. Asistir a este festival no solo se trata de disfrutar de las películas, es una oportunidad para mirar el mundo con otros ojos y para conectar, desde la butaca, con una de las expresiones culturales más profundas de Canadá.
Celebrado del 18 al 20 de julio en el Complejo Four Directions, al norte de Ontario, el WIFF es mucho más que un festival de cine, es un acto de reivindicación cultural. Fundado y dirigido por la artista y cineasta Shirley Cheechoo, este evento honra a todos aquellos relatos poderosos que visibilizan las voces indígenas, sus derechos, sus problemáticas y su sabiduría ancestral. Cada proyección es una forma de sanar, de reconstruir y de compartir una mirada que durante mucho tiempo fue silenciada.
El festival destaca por su ambiente íntimo y comunitario. A lo largo de sus jornadas, se presentan filmes de realizadores jóvenes, emergentes y galardonados de todo el mundo, muchos de ellos egresados del Instituto de Cine Weengushk. Pero también hay talleres, música en vivo, ponencias, presentaciones y actividades que permiten el intercambio entre generaciones y culturas. Todo está diseñado para fomentar la creatividad, fortalecer la identidad y construir conexiones desde la narración.
Para el público mexicano, este evento representa una oportunidad única para conocer otra cara de Canadá, una que se aleja de los estereotipos y se adentra en su esencia más profunda. Es también una invitación a reflexionar, a dialogar y a dejarse sorprender por relatos que, aunque nacen en contextos distintos, tocan fibras universales. Ya sea que viajes por vacaciones, por trabajo o para visitar a seres queridos, el WIFF puede ser ese encuentro inesperado que transformará tu manera de apreciar este país.
Llegar es sencillo; el aeropuerto más cercano es el Aeropuerto de Sudbury (YSB), que está ubicado a menos de dos horas de la sede del festival. Una vez en Ontario, los paisajes y la hospitalidad local hacen del trayecto parte del encanto. Y si estás planeando tu viaje desde México, Air Canada cuenta con conexiones que te acercan a esta experiencia desde distintas ciudades del país.
En Air Canada creemos firmemente que el intercambio cultural es una herramienta poderosa para construir puentes y enriquecernos mutuamente. Por eso, queremos seguir facilitando que más cinéfilos y viajeros puedan explorar todo lo que Ontario y Canadá tienen para ofrecer. Si buscas un plan diferente, inspirador y lleno de significado, súbete a uno de nuestros vuelos y acompáñanos en este homenaje al cine, la memoria y la resiliencia.
Fotografía: Cortesía de Air Canada
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